Crecer


Recibí golpes
muchos
eran duros sí
eran verdaderos
me caí.

Me levanté
torcida
encogida
hasta la médula.

Conocí puñetazos
como sólo sabe darlos
la vida verdadera.
Nunca salí menguada
de las heridas sufridas.
Más aun. Aprendí a crecer.